
Velas..Cómo empezó mi historia con las velas
Siempre he tenido velas en casa. Desde muy joven, me han acompañado en momentos especiales, en noches de calma y en pequeños rituales cotidianos. Me gustaba tenerlas en el baño junto a la bañera, en el dormitorio para crear un ambiente acogedor, en el salón para iluminar las noches con su luz suave. Al igual que las flores, las velas han sido para mí más que simples objetos decorativos: son detalles que transforman espacios, regalan emociones y nos invitan a conectar con el presente.
Con el tiempo, regalar velas se convirtió en un hábito. Era mi manera de decir "te pienso", "te quiero" o "quiero que te tomes un momento para ti". Siempre buscaba velas especiales, con esencias naturales y diseños que contaran una historia. Pero un día me pregunté: ¿por qué no hacerlas yo misma? ¿Por qué no crear velas con la misma dedicación y cariño con el que elijo las flores?
Así comenzó mi viaje en la fabricación de velas. Quería algo más que un simple objeto decorativo; quería crear piezas únicas, con ingredientes naturales, con fragancias que evocaran recuerdos y sensaciones, y con una estética cuidada que reflejara mi amor por la belleza en los detalles.
Investigué, experimenté con ceras y esencias, aprendí sobre mechas y tiempos de quemado… y, poco a poco, fui encontrando mi propio estilo. Al igual que con los arreglos florales, descubrí que hacer velas es una mezcla de arte y técnica, de intuición y precisión.
Hoy, cada vela que creo lleva un pedacito de mi historia y de mi pasión. Son el resultado de un amor profundo por los pequeños placeres de la vida, aquellos que nos invitan a pausar, a respirar hondo y a disfrutar del momento.
Si alguna vez has sentido que una vela transforma el ambiente de una habitación o te ha regalado un instante de paz, entenderás por qué decidí hacerlas. Y si aún no has encontrado tu vela perfecta, quizás una de las mías pueda convertirse en esa compañía especial.
Pero esto es solo el comienzo. Seguiré explorando nuevas combinaciones, nuevos aromas y nuevas formas de traer calidez a los espacios. Quédate a mi lado y acompáñame en este viaje, porque aún hay muchas creaciones por descubrir.